Deberes cristianos.
Pablo sigue exponiendo los deberes del cristiano en lo que el Señor nos exige.
- Ser diligente, no perezoso. (Flojo, indolente). Deut. 4:9; Pr.10:4; 2 Co. 8:22; 2 Ti. 2:15.
- Fervientes en espíritu, sirviendo al Señor. Gá 5:22, 25; Ef 5:18; Ro. 8:5-9.
- Gozosos en la esperanza. 1 Ts 2:19;1 Ti 1:1; Tit. 2:13.
- Sufridos en la tribulación. Hch 14:22; 1Ts 3:3.
- Constantes en la oración. Hch 1:14; 12:5; 1 Ts 5:17.
- Compartiendo para las necesidades de los santos; practicando la hospitalidad. 2 Re 4:8-11; Hch 28:7; He 13:2; 1 Pe 4:9.
- Bendecid a los que os persiguen; bendecid, y no maldigáis. Mt. 5:43-45; 1 Pe 2:23; 3:9.
- Gozaos con los que se gozan. Jn 3:29; 2 Co 7:13; Apoc. 19:7.
- Llorad con los que lloran. Gé 45:14; Jn. 11:31-35.
- Unánimes entre vosotros. Hch 1:14; 2:1;6; Fil. 2:2.
- No altivos, sino asociándoos con los humildes. Sal 138:6; Pr 16:5; 1 Ti. 6:17.
- No seáis sabios en vuestra propia opinión. Pr 3:7; Is. 5:21; 1 Co 1:20, 25-27; 3:18-19.
CONCLUSIÓN
Somos miembros de un mismo cuerpo. Dios nos ha unido unos con otros de una manera maravillosa. Debemos sentir los unos por los otros, participar de sus alegrías y de sus penas, No soy independiente, sino que más bien estoy conectado con todos los demás miembros del cuerpo.