Pablo y Silas encarcelados en Filipos.
El Espíritu, de nuevo, interviene a favor de la expansión de la palabra aunque las dificultades sean enormes. Siguiendo la interpretación teológica de Lucas, a través de un hecho natural, que es interpretado como una intervención providencial del Espíritu Santo, Pablo y Silas son liberados de su cautiverio, además propicia la evangelización de la casa del jefe de los carceleros de Filipos.
- Pablo y Silas en la cárcel de Filipos.
- Pablo y Silas presos, bajo medidas de seguridad. Ref. Hch. 16:24.
- Ambos misioneros estaban en paz. Ref. Hch. 16:25; Sal. 42:8; Col. 3:15-16.
- Sobrevino un violento terremoto. Ref. Hch. 16:26.
- La reacción del carcelero de Filipos. Ref. Hch. 16:27.
- Una voz reconfortante. Ref. Hch. 16:28.
- Una acción de agradecimiento. Ref. Hch. 16:29-30.
- La gran respuesta para llegar a la salvación. Ref. Hch. 16:31; Ro. 10:9.
- Evangelizando el hogar del carcelero de Filipos. Ref. Hch. 16:32-34.
- Sucesos en torno a la liberación de la cárcel.
- La forma de liberar a los presos. Ref. Hch. 16:35-36.
- La respuesta de Pablo, haciendo valer sus derechos como romano. Ref. Hch. 16:37.
- La súplica de los magistrados, al saber que tenían la ciudadanía romana: Ref. Hch. 16:38-39.
- Pablo y Silas, buscaron consolación en casa de Lidia, junto a los hermanos de Filipos. Ref. Hch. 16:40.
- Años posteriores Pablo escribiría una carta a esta comunidad. Ref. Fil. 1:1.
- Pablo entabló una relación especial con esta iglesia. Ref. Fil. 4:14-18.
- Varios de sus miembros estuvieron muy relacionados al ministerio de Pablo. Ref. Fil. 2:25; 4:18; 4:2.
- Era una iglesia sometida a Cristo. Ref. Fil. 2:12-13.
- Fue la única iglesia que Pablo le aceptó ayuda material en dos ocasiones. Ref. Fil, 4:16; 1 Ts. 2:9; 2 Ts. 3:8.
CONCLUSIÓN
No hay circunstancias adversas donde el creyente no puede ejercer su carácter de cristiano y transmitir el mensaje del reino. Pablo insiste en la condición de ciudadano romano y la convicción de las autoridades de la ciudad luego de haber violado las garantías procesales que prescribía el ius gentis. Pablo sabedor de esta circunstancia fuerza una disculpa pública.