El valor de la circuncisión.
Al afirmar que los judíos, por su desobediencia, anulaban las ventajas de tener la ley, Pablo se exponía a las críticas y objeciones de los judíos. La primera objeción tiene que ver con la circuncisión. Pasos en el argumento de Pablo:
- Reconoce la validez de la circuncisión, solo si se obedece la Ley. Ro. 2:25a.
- No la niega absolutamente, porque fue algo dado por Dios a los judíos que realmente creían en Él. Ro. 4:11.
- Hizo que Timoteo se circuncidara. Hch. 16:3.
- Si el judío no obedece la Ley, es equivalente a uno no circuncidado. Ro. 2:25b.
- Si el gentil (“el incircunciso”) obedece la Ley, entonces Dios lo considera como circuncidado. Ro. 2:26.
- Pablo dice, el hombre incircunciso “condenará” al circuncidado. Ro. 2:27.
- La circuncisión espiritual se realiza por gracia mediante la fe, Col. 2:11-12.
- La señal del pacto de la circuncisión. Gn. 17:14.
- del corazón. Dt. 10:16; Jer. 4:4.
- del oído. Jer. 6:10
- de labios. Ex. 6:12, 30.
CONCLUSIÓN
La verdadera circuncisión exigía un compromiso de vivir conforme a la voluntad de Dios en todo. Un gran porcentaje de judíos creían que si eran circuncidados ellos automáticamente gozaban de los benefcios del Pacto entre Dios y Abraham. Dios considera solo el corazón circuncidado