La concepción del reino de Dios en el creyente.
Los discípulos aún seguían esperando la restauración temporal de la realeza davídica con preeminencia de Israel sobre los otros pueblos, aún no habían entendido los acontecimientos a pesar de las últimas enseñanzas de Jesús.
- Interpretaban mal a los profetas sobre el reino mesiánico. Ref. Is. 11:12; 14:2; Ez. 11:17; Os. 3:5; Amós 9:11-15.
- Jesús había declarado la naturaleza espiritual de su reino. Ref. Mt. 16:21-28; 20:26-28; Lc. 17:20, 21; 18:31-34; Jn. 18:36.
- Los discípulos mantenían una concepción política-mesiánica terrenal del reino. Ref. Hch. 1:6; Mt. 20:21; Lc. 24:21; Jn. 6:15.
- Dios restringe el conocimiento del reino al hombre. Ref. Hch. 1:7.
- A veces resulta peligroso. Ref. Gn. 2:17.
- Incapacidad de comprenderlo. Ref. Jn. 13:17.
- Falta de madurez espiritual. Ref. Jn. 16:12.
- La revelación de Dios es gradual. Ref. Ef. 3:5.
- Se conoce en parte la revelación. Ref. 1 Co. 13:12.
- Los misterios pertenecen a Dios. Ref. Hch. 1:7.
- Las cosas secretas pertenecen a Dios. Ref. Dt. 29:29.
- Hay cosas que se mantienen selladas, esperando su tiempo. Ref. Dn. 12:9.
- Pertenece a Dios dar a conocer sus misterios. Ref. Mr. 13:32.
- El reino de Dios se basa en el poder espiritual y no terrenal.
- Primero se debe recibir el poder. Ref. Hch. 1:8a.
- Segundo ser testigo. Ref. Hch. 1:8b.
CONCLUSIÓN
El concepto del Reino de Dios en los tiempos se Jesús se interpretaba como un restablecimiento de lo terrenal en lo político y religioso.
De acuerdo a las enseñanzas de Jesús, la visión de reino cambia a un concepto que va más allá de lo temporal.